Madeira
El pasado mes de Septiembre hice un viaje a Madeira durante tan sólo una semana, lo que ya me hacía presagiar que no iba a tener tiempo suficiente para poder conocer la isla.
Aún así me propuse descansar y disfrutar de sus lugares como: Puerto Moniz, Punta de Pargo, San Vicente, Machico, Arco de Calheta y otros que no puedo dejar de ilustrar y destacar.
Camara de Lobos: Al llegar me sorprendió mucho que el pueblo se encontraba en fiestas y adornado de manera muy original, toda la decoración era reciclada y muy colorista, además de su pequeña iglesia y su gran puerto abierto al mar.
Funchal: Como capital no defrauda, aportando imágenes muy curiosas como casas de puertas pintadas por los habitantes del lugar y haciendo de éste un sitio mágico y apetecible de conocer. Como consejo no dejes de hacer el descenso desde Monte en los carros de cestas.
Punta de San Lorenzo: Lo que en principio se presentó como una caminata de unas 3 horas se prolongó bastante más. No había forma de dejar de fotografiar cada rincón de este zona costera, rica e impresionante en acantilados y constrastes de colores entre lo casi desértico y el tono del Mar. Miradores al infinito y olas de grandes alturas.
Y ya para terminar este recorrido no puedo dejar atrás Santana: Lo que más te sorprende es el estilo de las casas tradicionales de Madeira, pequeñas casas de techos a dos aguas cubiertos de cáñamo.
En resumidas cuentas fue un viaje totalmente disfrutable y que recomiendo sinceramente.